Crear una web o hacer un rediseño web de tu negocio es una decisión importante que a menudo genera dudas y confusión. Si estás pensando relanzar tu sitio web, estas son quizás algunas de las preguntas que te estarás haciendo:
¿Deberías rediseñar tu web? ¿Ha llegado el momento de darle un lavado de cara o puedes esperar? ¿Necesitas crearle por completo un nuevo look o es suficiente solo con un par de acciones?
El 75% de la credibilidad de tu sitio web viene del diseño, por lo que si no estás alcanzando los resultados que esperas, debes pensar en iniciar un proceso de rediseño web. Y para hacerlo debes considerar algunos puntos clave.
En esta guía, tienes las 7 preguntas que debes hacerte antes de tomar la decisión de rediseñar la web de tu negocio.
- Haz un análisis de lo que te funciona y de lo que no
Parece simple, pero esta es una cuestión que a menudo se pasa por alto a la hora de rediseñar una web. Y sin embargo es un componente clave para la planificación inicial y para el proceso de cambio de tu web.
Muchas marcas simplemente deciden que la apariencia de su página está algo obsoleta tras unos años y consideran que cambiar el diseño web puede ser la solución. Pero ¿solamente se trata de poner la web más bonita? Claramente no.
Para obtener resultados óptimos, es importante profundizar en algunos niveles más que solamente el diseño como tal. Solamente así podrás asegurarte de obtener resultados significativos. Y de conseguir el máximo valor de tu inversión en este proyecto de rediseño. Al fin y al cabo, probablemente no vayas a hacer este cambio a menudo, por lo que es importante empezar el proceso desde este primer paso.
Al considerar los objetivos para el rediseño de tu sitio web, debes decidir qué aspectos y características cambiar. Puede ser útil comenzar con preguntas orientadas al análisis de lo que tienes en tu web.
- ¿Qué es lo que más falla en tu web?
- ¿Cuáles son los problemas particulares que estás tratando de resolver con este proceso de cambio?
- ¿Qué funciona y que no funciona? Qué páginas no son visitadas o en qué CTA no se hace clic jamás, etc.
- ¿Cómo han cambiado las necesidades desde la última vez que actualizaste tu sitio web?
- ¿Cuáles son los resultados específicos que quieres lograr con este rediseño y cómo puedes medirlos?
Haz que las respuestas a estas preguntas ayuden a orientar los objetivos y requisitos de tu proyecto. El diseño de tu sitio web afecta directamente a tu rendimiento de marketing, por lo que es imprescindible utilizar este análisis para tomar decisiones correctas. Este análisis debe ser tu punto de partida para el cambio.
- ¿Tu web está desactualizada o el diseño es pobre?
Dijo Oscar Wilde: “Solo hay una primera vez para causar una primera buena impresión”.
Esto es así tanto en la vida personal como en el mundo de los negocios, así que tu web, además de ofrecer buenas soluciones y contenidos, debe entrar por los ojos.
Ahora, mira tú web y piensa: ¿tu web funciona como una herramienta de atracción y conversión de clientes, o es justo todo lo contrario?
Recuerda que un buen desarrollo web y un diseño que invite a seguir en la página son aspectos que los usuarios valoran a la hora de decidir si permanecer en tu página o marcharse a tu competencia.

- ¿Necesitas cambiar de plataforma?
Wix, GoDaddy o Blogger están bien para empezar o para un bloguer que escriba por afición. Pero no son soluciones adecuadas para un negocio.
Tanto si piensas hacer un rediseño web como si vas a crear la tuya por primera vez, elige WordPress. A día de hoy, trabajar con WordPress es la mejor elección para pequeñas y medianas empresas, ya que como editor de contenidos es gratis si lo alojas en tu servidor.
- ¿Los contenidos necesitan refrescarse?
En marketing digital, «menos es más».
Esto quiere decir que tu contenido debe ser fácilmente escaneable por los usuarios e incluir imágenes y recursos gráficos para aligerar la lectura, así como títulos, subtítulos, viñetas, etc.
Además, cada página debería tener un objetivo concreto y una llamada a la acción.
Recuerda que en internet no leemos, escaneamos. Por eso, el texto debe resultar visualmente atractivo para los lectores.
Si tu sitio web tiene cierta antigüedad, un rediseño puede ser la solución para presentar la información de forma más ordenada, atractiva y apetecible para tus usuarios.

- ¿Tu web es segura?
Si no lo es, estás arriesgando mucho. Más de 40.000 webs reciben ataques cada día, y el 86% de las páginas web tienen al menos una brecha de seguridad.
Si no dispones de un sistema que se encargue de respaldar, proteger y escanear en busca de malware, no solo estás exponiendo tu seguridad, sino también la de tus usuarios.
Como medidas básicas, te recomendamos:
- Actualizar periódicamente plugins y temas que utilices.
- Instalar el certificado SSL para que la navegación sea HTTPS.
- Instalar un plugin de seguridad web.
- ¿Representa a tu marca?
Echa un vistazo y fíjate en qué dice tu web sobre tu negocio. ¿Representa la calidad de los servicios y productos que ofreces?
Con el tiempo, los negocios evolucionan, crecen y mejoran. Así que si tu experiencia ahora es mayor y has empezado a vender servicios premium (por ejemplo), tu web debería reflejarlo. Y el rediseño es el camino para ello.
Del mismo modo, si desde que creaste tu web has incorporado nuevos servicios o productos a tu negocio, asegúrate de que cada uno de ellos tenga su correspondiente página de venta a través de la cual tus clientes puedan contratarte.
- ¿Sigues dirigiéndote a la misma audiencia de siempre?
Al igual que tus servicios maduran y evolucionan, a menudo, a medida que un negocio crece, su audiencia cambia.
Tal vez empezaste ayudando a principiantes y ahora trabajas con clientes con un nivel superior. O puede que hayas descubierto una hiperespecialización con la que conseguir extraordinarios resultados en un nicho determinado.
Sea cual sea el motivo, lo importante es que, si tu audiencia ha variado desde tu último rediseño web, ¡toca actualizar el diseño y el copy de los textos!

- ¿Te identificas con tu web actual?
Ya hemos dicho que los negocios evolucionan y que también lo hacen las audiencias. Pues nosotros no somos menos.
Somos personas y, como tales, las experiencias (profesionales y personales) y el propio paso del tiempo hace que nosotros mismos también experimentemos una evolución.
Mira tú web. Lee los textos. Fíjate en tus fotografías y en las imágenes. Ahora, pregúntate: ¿lo que ves te representa?
- ¿Sí? Genial; un problema menos del que preocuparte.
- ¿No te identificas con ello? ¡Toca rediseño web!
¿Necesitas hacer un rediseño web?
Al responder estas interrogantes podrás tener un panorama completo de por qué debes rediseñar tu web y en qué debes enfocarte. Además, si conoces esta información en detalle, cuando tengas el rediseño web en proceso, podrás analizar si los cambios se ajustan a las necesidades de la empresa.
Si buscas una Agencia Digital en Miami para crear un sitio web profesional o rediseñar el actual, déjanos tus datos aquí para contactar contigo, y brindarte la asesoría que necesitas para impulsar la web de tu negocio.